DURANTE TU SAFARI USA LOS 5 SENTIDOS PARA CONECTAR CON LA NATURALEZA
La ciencia muestra que el tiempo en la naturaleza ofrece una gran cantidad de beneficios psicológicos y fisiológicos. Sin embargo, más de la mitad de la población mundial vivíe en áreas urbanas, con alrededor del 82 % de los norteamericanos, el 80 % de los latinoamericanos y el 75 % de los europeos residiendo en ciudades. Por eso buscar el contacto con la naturaleza, y pasar tiempo envueltos en ella, es un hábito que deberíamos incorporar en nuestras vidas. Un safari es una ocasión perfecta para poner a prueba tus sentidos, conectar con la naturaleza y salir del estrés que envuelve nuestra vidas. Es por eso que mucha gente lo usa como terapia para asilvestrarse, conectar con nuestras raíces más profundas y volver con fuerzas renovadas para retomar la rutina en la ciudad.
Pon a prueba tus sentidos durante tu viaje a África, y le sacarás un partido mucho mayor de lo que te imaginas:
Visión
Las personas que contemplan a menudo un paisaje natural reportan una mayor satisfacción con la vida, felicidad y autoestima, y menos soledad y depresión.
Para disfrutar de la naturaleza, no solo hay que estar en ella, si no fijarse, y dedicarle el tiempo necesario....para ello a veces es necesario dejar la tecnología en la habitación, o mejor aún en casa. Quizá, fijarse en los pájaros revoloteando sobre tu cabeza o en la forma en que el sol ilumina la hoja de un árbol, en las gotas de agua que se difuminan en una cascada, en el ajetreo con el que los tejedores construyen sus nidos. Ese tipo de acciones conscientes, nos ayudarán a dejar que la naturaleza penetre en nuestro interior con mayor intensidad.
Oído
Pocas cosas tan maravillosas nos ofrece la naturaleza como sus sonidos, como poco a la altura de las imágenes. Los sonidos naturales como el canto de los pájaros, el canto de los grillos y el agua que fluye nos brindan información que nos ayuda a comprender y sentir nuestro entorno, produciéndonos una sensación de paz y armonía. Prestar atención a los sonidos, nos ayudará a tener una experiencia mucho más completa de nuestro entorno. No se trata de encontrar un grupo de elefantes hacerles una foto a toda prisa y salir zumbado. Apagad el motor, y quedaros entre ellos escuchando sus sonidos, algunos en frecuencias tan bajas que son casi imperceptibles para el oído humano. Escucha todo lo que te rodea, el viento que agita las ramas de los árboles o las hierbas de la sabana, el agua de la lluvia al caer, las pisadas de un animal, o incluso las tuyas propias. Las noches en la sabana o en la selva, son un momento perfecto para escuchar e imaginar, especialmente si se está en un tented camp (ver post : Cae la noche en el Serengeti)
Olfato
El olfato no es nuestro sentido más fuerte, pero su asociación con nuestras emociones es poderosa. Los participantes en un estudio de 2014 asociaron los olores de la cera de abejas y el aire fresco del verano con la felicidad, y otros estudios informaron que los aromas naturales de las plantas en flor los hacen sentir más tranquilos y alertas mientras mejoran su estado de ánimo.
¿Cuáles son los aromas naturales que tienes alrededor? ¿Cómo cambian en el transcurso de un día ? Levántate a primera hora de la mañana, cierra los ojos y respira, este es uno de los mayores placeres que puedes experimentar estando en la naturaleza....haz lo mismo por la tarde, o la noche. Piensa en que te sugieren los aromas, praderas, selva, playa...Concédele unos minutos a este sentido durante tu safari, varias veces al dia....eso si....nunca cerca de una charca de hipopótamos!!
Tacto
Quizá este no es uno de los sentidos que más podemos poner a prueba durante un safari, ya que aunque se ha demostrado que acariciar a un perro, por ejemplo, ayuda a las personas a relajarse, reduce la presión arterial y la frecuencia cardíaca, y proporciona vínculos sociales sin la energía que se necesita para tener una conversación, tocar a los animales salvajes no es precisamente una gran idea.
No obstante hay muchas sensaciones de las que puedes disfrutar durante tu viaje por África ligadas al tacto. Cuando caminamos descalzos sobre la arena de la playa en Zanzibar, sentimos la brisa del viento en la cara y en el pelo, o rozamos los delicados pétalos de una flor, nos sentimos más conectados con la naturaleza, y contribuye a complementar las sensaciones que aportan los otros sentidos.
Gusto
Definitivamente este es el sentido que menos usarás durante un safari...excepto en los restaurantes de los camps y lodges, algunos de los cuales ofrecen una experiencia realmente estimulante en este sentido.
Pero si después viajas a Zanzibar la Isla de las Especias el gusto junto que el olfato pueden aportarte extraordinarias sensaciones. Zanzíbar huele a clavo y cardamomo, a canela y vainilla, a jengibre y nuez moscada, no por nada es conocida como la isla de las especias. Adentrarse por sus desordenadas plantaciones de especias es una de las experiencias más increíbles que se pueden vivir en la isla, y además de los anteriores 4 sentidos, podemos poner a prueba el gusto, aprendiendo a diferenciar el sabor (o aroma) de las mismas.